viernes, 4 de enero de 2008

Carta N° 86

- Tenemos esa suerte-



Y nos fuimos a Sullana! aqui el calor es veeeeeeerdaderamente estresante e insoportable! un par d vasos de cerveza que pense calmarian mi sed, me mandaron a dormir, aparecieron los dolores de cabeza (algo pasa conmigo, ultimamente no estoy muy bien, pero no dire nada por ahora) bueno dormir literalmente porque iniciaron los famosos "chongos" Masias.



Mi familia materna, esta caracterizada por estos infaltables escandalos. En cada reunion familiar deben haber por lo menos 2, ya sean por los esposos celosos, las hermanas que dijeron algo de mas, o los sobrinos que pelean entre si. Esto se ha vuelto una costumbre familiar, tanto asi, que a nosotros ya no nos parece raro, es mas esperamos ansiosos a ver quien lo origina ahora.

Creo que fue mi prima recien casada con su esposo recien salido del cascaron, la idea es que no me dejaban dormir, porque entre gritos y llanto, quien puede dormir? asi que sali y me dedique a tomar algo con mis primos que totalmente ebrios decian quererme, estimarme y quien sabe que cosas mas.

Cuando sentia q me iba a morir del dolor, mi madre tiene la genial idea de irnos a Punta Sal, pero para ello debere esperar hasta el dia siguiente.

Estando ya en Punta Sal, me dominio la depre y es que el mar suele causar ese efecto en mi, hasta que un pedacito de cielo, el niño mas lindo del mundo, me prometio quererme mucho, pero el y yo sabemos, que eso sera hasta que cumpla 14 años y encuentre a una niña de su edad :D

Una vez mas mojada, llena de arena pero totalmente feliz, regreso a Talara, y regreso porque ya mañana es Navidad.

Pd: Estoy pensando en quedarme, pero quiero pensarlo un poco mas

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